La Dirección General de Tráfico está trabajando desde hace años en una plataforma, denominada DGT 3.0, con el objetivo de que en 2025 los vehículos estén conectados a una base de datos central que compartirá entre todos los conductores y gestores de tráfico información en tiempo real sobre la circulación y el estado de las carreteras.
Gracias a esta plataforma los conductores podrán ir conociendo en todo momento las incidencias que se estén registrando en la vía, detectar la presencia de usuarios vulnerables en la carretera o saber la ubicación exacta de posibles accidentes o coches averiados, entre otras funcionalidades.
Y es que los vehículos podrán indicar a la DGT 3.0 cuando quieran ser visibles para otros, bien por estas paradas o porque deben circular a velocidad excesivamente reducida por avería o mala visibilidad. Pero también las ambulancias o los ciclistas podrán enviar una señal a la nueva plataforma para ser advertidos por otros conductores más allá de la línea de visión.
El objetivo final de esta plataforma, por tanto, es lograr una experiencia de conducción mucho más segura e inteligente que permitirá, según los expertos, ayudar a reducir los accidentes de tráfico hasta en un 80%.
¿Cuándo se lanzará la plataforma DGT 3.0?
DGT 3.0 comenzó a gestarse ya en 2017, año en el que salió a concurso el pliego que describe detalladamente el funcionamiento de la plataforma, y en junio de 2021 se anunció que se había completado la implementación de 7 de las funcionalidades exigidas en su desarrollo.
Obviamente, para el pleno funcionamiento de esta nueva plataforma los coches deberán tener incorporados sistemas de conexión o los conductores descargar una app, por lo que a medida que los coches nuevos vayan incorporando conectividad en su equipamiento de serie, la plataforma tendrá más usuarios y mejorará su funcionamiento.
En cualquier caso, 2025 se plantea en España como la fecha del pistoletazo de salida de este sistema de conexión. Y es que se prevé que para esa fecha las zonas urbanas, principales carreteras y líneas de ferrocarril contarán ya cobertura 5G, lo que facilitará la conectividad y disminuirá la latencia (es decir, los tiempos de retardo) en las comunicaciones.
La plataforma DGT 3.0 está estrechamente vinculada a la tecnología 5G.
[/et_pb_image][/et_pb_column]
Luces de emergencia V-16
Una de las primeras iniciativas de este proyecto global de conectividad entre vehículos y la DGT se encuentra en las luces V-16 y V-27.
Las luces V-16 son unas señales luminosas que ya pueden utilizarse para señalizar una avería o accidente en lugar de los clásicos triángulos. La principal ventaja de la luz de emergencia V-16 reside en que es muy fácil y segura de utilizar, ya que los conductores no tienen que apearse del vehículo para colocarla, sino que únicamente tienen que depositarla sobre el techo del coche, al que queda fijadas rápidamente de forma magnética.
[/et_pb_text][/et_pb_column][/et_pb_row]
Aunque ya es legal utilizar las luces V-16 en lugar de los triángulos, no será hasta el 1 de enero de 2026 cuando estas balizas sustituyan definitivamente a los tradicionales triángulos. En esa fecha, la Ley establece que estas balizas luminosas deberán ofrecer también servicios de geolocalización con el fin de que puedan integrarse con los sistemas de la DGT 3.0 y difundir las coordenadas exactas de la ubicación del vehículo averiado.
Las luces V-27, por su parte, forman parte de un sistema de alerta que tendrán incorporados los vehículos que estén conectados al Punto de Acceso Nacional de Información de Tráfico y Movilidad, el nexo de unión entre los datos y los intermediarios que los reciben, y que se activa automáticamente en el sistema de a bordo del coche advirtiendo a los conductores de la presencia de peligros cercanos.
Actualmente los paneles de mensajes físicos ubicados en las grandes carreteras informan de este tipo de incidencias, pero con el sistema V-27 estos mensajes aparecerán directamente en el salpicadero de los vehículos conectados.
Aplicaciones prácticas de la DGT 3.0
El fin último de la DGT 3.0 es permitir la interconexión entre todos los actores que forman parte de la circulación vial: fabricantes de vehículos, plataformas de transporte público, empresas de alquiler, fabricantes de dispositivos de seguridad, conductores…
Así, dentro de este proyecto de interconexión está previsto que:
- Los operarios de grúas comuniquen de forma telemática la ubicación de un vehículo averiado.
- Los operadores de infraestructuras de carreteras deberán informar a esta nueva plataforma sobre las obras planificadas y la evolución de las mismas en tiempo real.
- Se podrá conocer el principio y fin de eventos deportivos o manifestaciones con dispositivos de geolocalización en los coches de incidencias.
- También será factible identificar a los ciclistas si, por ejemplo, llevan un dispositivo de geolocalización integrado en sus bicicletas.
- Otra de las aplicaciones que prevé esta herramienta es el poder avisar a los conductores, con tiempo suficiente, si su vehículo no puede circular por alguna de las nuevas Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) que en 2030 deberán disponer todas las ciudades de más de 50.000 habitantes, de acuerdo a la nueva ley del cambio climático. Y es que en principio se podrán cruzar los datos de las etiquetas ambientales de los coches con los de las ZBE y avisar a los conductores.
Cada vez queda menos para la DGT 3.0 sea un proyecto y se convierta en una realidad. De hecho, ya se han hecho pruebas piloto que han permitido comprobar el funcionamiento de este tipo de tecnología de interconexión. Por ejemplo, en 2019 la Dirección General de Tráfico, Telefónica y Seat hicieron una prueba en la que un ciclista se detuvo en la carretera de Becerril de la Sierra (Madrid) y el conductor del coche recibió una alarma para advertirle de la proximidad de esa bicicleta detenida en la vía.
¿Qué opinas? ¿Te parecen útiles estas futuras aplicaciones? ¡Te leemos!
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.